Un encuentro fatídico
Pero para Amanda Tiller, formar finalmente una familia debería haber sido un gran logro. Originaria de la pintoresca ciudad de Johnstone, Pensilvania, Amanda vivió una vida aparentemente normal hasta que el destino intervino.
Un fatídico día, se cruzó con Tristán, un hombre que encarnaba la perfección a sus ojos.
Su conexión fue instantánea y Amanda sintió una calidez que nunca antes había sentido. Tristán no era solo un amante; era un alma gemela y ella imaginaba un futuro en el que construirían una vida juntos, compartiendo sueños y superando desafíos como una fuerza unida.