Ten cuidado
Lienzo
Parecía que el gato tenía mucha hambre. “Bueno, si vienes por aquí con regularidad, me aseguraré de que tengas agua fresca y comida aquí, amigo”, prometió.
El gato lo miró. Tenía todo tipo de rasguños en la cara y Jason deseó poder lavarlo bien, pero sabía que tenía que tener cuidado.
Los animales callejeros eran portadores de enfermedades y él no quería correr el riesgo.