Peligro acechante
pexels-pixabay
La mayoría de las personas que se han topado con leones o han estado en reservas de caza reciben una severa advertencia de no acercarse demasiado al animal ni enfrentarse a él de ninguna manera. El ataque es tan rápido que, cuando grites pidiendo ayuda, será demasiado tarde.
Los entrenadores nunca dejan que las emociones nublen su juicio cuando tratan con estas criaturas, pero Adolfo decidió dejar de lado la lógica y seguir el instinto por alguna extraña razón. La mayoría lo llamaba locura y él lo llamaba pasión.