NO ENCONTRAR NINGÚN DESCANSO
Esa tercera noche después de no encontrar a Molly podría haber sido la peor. Megan no podía encontrar consuelo en su cama. Lloró casi toda la noche, sin poder descansar ni un minuto.
Cada vez que Megan escuchaba un ruido afuera, despertaba a su esposo, pensando que Molly había regresado milagrosamente. Pero no prevalecerá, pero…