¿SE TERMINÓ?
Megan dejó escapar un suspiro de alivio cuando vio su rostro. Era el mismo chico que vieron en las imágenes, estaba segura. “Pero ahora que lo tienen, esta pesadilla puede terminar.
Podemos resolver esto y seguir con nuestras vidas”. Esas fueron las palabras de Megan. Pero su gata Molly tenía otros planes.