¿Recuerdas cómo hablamos de lo pequeños que son los gatitos cuando tienen apenas unas semanas de vida?
Observa la comparación entre la mano del dueño de este gato, el zapato en el que duerme el gatito y luego el gatito en sí.
Sin embargo, lo que nos encanta de esta imagen es que la forma en que duerme el gatito lo hace parecer un pequeño canguro. ¿No es así?
Si los dueños aún no le han puesto nombre, te recomendamos encarecidamente que lo llames “Joey”. ¡Le queda perfecto a este pequeño peludo!