Ir al veterinario
Jazmine sacó la jaula de Moople y ayudó a la nueva mascota a entrar. Todo el tiempo, continuó gruñendo, tratando de arañarle las manos.
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¿Tenía rabia o estaba enfermo? No lo sabía, pero necesitaba llegar a la raíz del problema. Lo único que podía hacer ahora era correr al veterinario y hacerse un análisis. Estaba dispuesta a gastar una fortuna para salvar a su nueva mascota.