No hay nada allí
Lienzo
La policía realizó una búsqueda exhaustiva en la propiedad del vecino. Encontraron la trampilla y el sótano, tal como Tracey había descrito. Pero no había señales de Max ni del hombre que se lo había llevado.
La búsqueda generó sentimientos encontrados: alivio porque la policía creyó a Tracey, pero frustración por la falta de avances. La esperanza de Tracey y Stuart flaqueó, pero no podían darse por vencidos.
La investigación estaba en curso y debían tener paciencia. La búsqueda había proporcionado una confirmación, pero el resultado aún era incierto. Debían aferrarse a la esperanza.