Un niño duerme rodeado de “gatos” hasta que un oficial le dice a su madre que entre al vehículo
Un amante de los animales
Lienzo
Emma siempre había sido una amante de los gatos. Su casa estaba llena de compañeros felinos, cada uno con su propia personalidad.
Cuando su hijo, Sam, le pidió un gato propio, ella no pudo resistirse. Se dirigieron al refugio local, donde el olor familiar de los gatos y el sonido de los maullidos llenaban el aire.
Los ojos de Sam se iluminaron al ver un pequeño gato atigrado acurrucado en la esquina de una jaula. “¡Mamá, mira este!”, exclamó, señalando con entusiasmo.