Una perra se niega a dar a luz. El veterinario grita: “Dios mío” cuando descubre la cruel verdad
Decidir ser proactivo
Decidieron ser proactivos y ofrecieron al veterinario toda su cooperación para ayudar a descubrir a los perpetradores.
“Queremos hacer todo lo que podamos para ayudar”, dijo el marido con firmeza. El veterinario asintió, apreciando su determinación.
“Su información podría ser crucial”, respondió. La pareja se preparó para lo que estaba por venir, sabiendo que jugarían un papel fundamental en el descubrimiento de la verdad.
“Trabajemos juntos para evitar que esto le pase a la mascota de alguien más”, concluyó el veterinario.