Enloqueciendo
Cuando Julián le informó a Jennifer sobre el diagnóstico del veterinario, ella se preocupó mucho y rompió a llorar. La falta de claridad solo aumentó su confusión y frustración. Temerosa de lo que el comportamiento de Luna pudiera indicar sobre la salud de su bebé, Jennifer se comunicó de inmediato con su médico para buscar tranquilidad urgente. Él le aconsejó que fuera al hospital lo antes posible. Tenía mucho miedo de que el médico encontrara algo mal.