Gruñendo
Danny pensó que tal vez la fuerza del miedo de la gatita fuera lo que la hacía actuar de forma tan agresiva. Pero cada vez que Danny intentaba acercarse a ella, casi lo mordía. Había oído gruñir a los gatos antes, pero oírlo de un gatito de tan pequeño tamaño le sorprendió. Después de pensarlo un rato, se le ocurrió una idea que podría ayudar.