Un gatito solitario de apenas unas semanas de vida fue abandonado en la zona de South Bay, en el estado de California. El gatito tuvo que sobrevivir solo a una edad tan temprana. Afortunadamente, un grupo de hermanas se dio cuenta y lo acogió. El gatito terminó formando un vínculo muy fuerte en su hogar con uno de los perros esquimales siberianos de las hermanas que vivían junto con los otros animales peludos. El husky se llamaba Lilo.
¿Quién habría pensado que este gatito que una vez luchó realmente crecería y se convertiría en un canino muy valiente y diferente con un comportamiento muy extraño?
